Por: HÉCTOR SILVESTRE HIJO (hbss30@hotmail.com)La patria esta de luto. El fallecimiento de Miguel Cocco, ex director de Aduanas, ha esparcido la pena, el duelo y el pesar en toda la nación.
"Hoy despedimos un gran hombre", se le oyó decir al vicepresidente de la República, Rafael Alburquerque.
Y es que los grandes hombres nunca mueren. Sus huellas quedan grabadas para siempre. La mancha indeleble se sus actos perduran eternamente como símbolo de su verticalidad y grandeza.
Debido a su responsabilidad y limpidez como hombre de Estado, a Miguel Cocco, se le vio como un referente desde la gestión pública.
Pero no solo fue un referente como defensor de los recursos públicos. Miguel es, y será por siempre, un referente moral, un referente ético, un referente honrado, un referente honesto, puro, integro, decente, incorruptible, insobornable, virtuoso...un referente humano.
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